Miguel Ángel Valero
El Índice Bloomberg Commodity (BCOM) ha perdido aproximadamente un 27% desde su máximo plurianual de junio de 2022, a pesar de haberse recuperado un poco desde su mínimo de febrero de este año, cuando estaba aún más abajo. "A primera vista, esto parece sorprendente: algunos componentes clave del índice han tenido un comportamiento positivo o, al menos, se han mantenido. El oro, muy ponderado en el BCOM con casi el 17% del índice, ha sido la estrella, con una subida de alrededor del 30% desde junio de 2022. Del mismo modo, el petróleo crudo (tanto el WTI como el Brent) se ha comportado mejor que el índice en su conjunto, aunque también el petróleo ha bajado desde sus máximos anteriores", señala un análisis de DWS.
"Sin embargo, hay materias primas que han tenido un comportamiento extremadamente malo, contribuyendo en última instancia al importante descenso general del BCOM. Un ejemplo notable son los cereales. El subíndice de los cereales ha bajado aproximadamente un 40% desde junio de 2022. Esta drástica caída representa un brusco retroceso con respecto a 2022, cuando los precios del maíz, el trigo y la soja se dispararon tras la invasión rusa de Ucrania, uno de los principales exportadores de cereales del mundo. En aquel momento, los precios del trigo se dispararon hasta alcanzar su nivel más alto desde que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) comenzó a registrarlos en 1990", destaca.
Esto, sin embargo, animó a los productores de cereales a ampliar su superficie de cultivo y, gracias a ello y a una climatología favorable, el mercado está ahora inundado. Brasil, por ejemplo, tuvo una abundante cosecha de maíz y soja el año pasado, y Rusia exportó una cantidad récord de trigo en 2023. Ucrania, por su parte, logró enviar la mayor parte de su propia cosecha a pesar del bloqueo ruso de sus puertos del Mar Negro.
Según los cálculos de Bloomberg, los cereales son más volátiles que otras materias primas. Es el sector con mayor elasticidad de precios y actualmente la caída de precios parece acelerarse. El gráfico de DWS muestra la tendencia del subíndice de cereales de Bloomberg, que suele ir por delante del índice de materias primas BCOM.
"Si esta relación se mantiene, sugiere que puede haber más potencial a la baja para el índice general de materias primas. Y el posicionamiento especulativo, según los informes semanales de la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas de EE.UU., sugiere que los participantes en el mercado prevén continuos descensos de los precios del trigo", advierten los expertos de DWS.
El Índice Bloomberg Commodity (BCOM) ha perdido aproximadamente un 27% desde su máximo plurianual de junio de 2022, a pesar de haberse recuperado un poco desde su mínimo de febrero de este año, cuando estaba aún más abajo. A primera vista, esto parece sorprendente: algunos componentes clave del índice han tenido un comportamiento positivo o, al menos, se han mantenido. El oro, muy ponderado en el BCOM con casi el 17% del índice, ha sido la estrella, con una subida de alrededor del 30% desde junio de 2022. Del mismo modo, el petróleo crudo (tanto el WTI como el Brent) se ha comportado mejor que el índice en su conjunto, aunque también el petróleo ha bajado desde sus máximos anteriores. Sin embargo, hay materias primas que han tenido un comportamiento extremadamente malo, contribuyendo en última instancia al importante descenso general del BCOM. Un ejemplo notable son los cereales. El subíndice de los cereales ha bajado aproximadamente un 40% desde junio de 2022. Esta drástica caída representa un brusco retroceso con respecto a 2022, cuando los precios del maíz, el trigo y la soja se dispararon tras la invasión rusa de Ucrania, uno de los principales exportadores de cereales del mundo. En aquel momento, los precios del trigo se dispararon hasta alcanzar su nivel más alto desde que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) comenzó a registrarlos en 1990. El subíndice de cereales ha mostrado habitualmente hacia dónde puede dirigirse el Bloomberg Commodity Index |
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Esto, sin embargo, animó a los productores de cereales a ampliar su superficie de cultivo y, gracias a ello y a una climatología favorable, el mercado está ahora inundado. Brasil, por ejemplo, tuvo una abundante cosecha de maíz y soja el año pasado, y Rusia exportó una cantidad récord de trigo en 2023. Ucrania, por su parte, logró enviar la mayor parte de su propia cosecha a pesar del bloqueo ruso de sus puertos del Mar Negro. Según los cálculos de Bloomberg, los cereales son más volátiles que otras materias primas. Es el sector con mayor elasticidad de precios y actualmente la caída de precios parece acelerarse. Nuestro Gráfico de la Semana muestra la tendencia del subíndice de cereales de Bloomberg, que suele ir por delante del índice de materias primas BCOM. Si esta relación se mantiene, sugiere que puede haber más potencial a la baja para el índice general de materias primas. Y el posicionamiento especulativo, según los informes semanales de la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas de EE.UU., sugiere que los participantes en el mercado prevén continuos descensos de los precios del trigo. |
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