La Ópera de Tenerife acoge 'El niño y los sortilegios' ('L’enfant et les sortilèges') de Maurice Ravel. Se trata de una ópera familiar que retrata un viaje fantástico en una casa de campo en Normandía, donde un niño travieso desata una serie de eventos mágicos tras ser regañado por su madre.
Esta historia se llena (aún más) de magia gracias a su elenco y a la dirección musical de Jordi Francés. La soprano madrileña Natalia Labourdette hará el papel de la princesa, el ruiseñor y el fuego.
“Con este debut, en cierto modo, completo un ciclo que se inició nada más empecé a adentrarme en el mundo del canto lirico. Fue la primera ópera de la que formé parte como coro en el Conservatorio de grado medio. Por otra parte, será mi primera vez en el auditorio de Tenerife y me encanta que se dé junto al maestro Jordi Francés con quien ya tuve la oportunidad de trabajar en Orphee (P. Glass) del Teatro Real en coproducción con Teatros del Canal (temporada 22-23)”, cuenta.
Acompañando a Natalia Labourdette, Na’ama Goldman como el niño, o Karina Demurova, como la madre, la libélula y la taza china. La dirección de escena está a cargo de James Bonas, con la escenografía y vestuario de Thibault Vancraenenbroeck. El equipo técnico también juega un papel fundamental en la creación de la magia de esta historia: el diseño de luces de Christophe Chaupin y la producción de Ópera National de Lyon en colaboración con el Audiori de Barcelona crean la atmosfera perfecta para esta historia.
Además de su participación en “El niño y los sortilegios”, Labourdette ha interpretado a Jeannette en la producción de “L’amant anonyme!” de Joseph Bologne (Chevallier de Saint Georges) en Aalto Theater Essen. Y en junio la podremos ver interpretar a Anna Reich en la producción de “Die Lustigen Weiber von Windsor” de Otto Nicolai en Opern Wuppertal.