Desde el pasado 3 de junio es posible presentar la declaración de la renta en persona en las oficinas, siempre y cuando se haya reservado una cita con anticipación. Esta nueva modalidad llega justo a un mes antes (1 de julio) de que finalice la Campaña de la Renta 2023 en España. De hecho, aún son muchos los españoles que no han realizado la Declaración. Tal y como ha anunciado el Ministerio de Hacienda el número de declaraciones presentadas a un mes vista de la finalización del plazo es de 15,2 millones, lo que supone que el 34,8% de los contribuyentes no realiza la Declaración de la renta hasta 30 días antes de la fecha límite.
“Ya sea porque prefieren hacerlo en persona, porque no se sienten cómodos realizando el proceso a través de Internet o simplemente por despiste, son muchos los españoles que dejan la declaración para el final”, analiza Borja Aranguren, CEO de Cobee.
De esta manera, se espera recibir 23,3 millones de declaraciones en esta campaña la mayoría (14,6 millones) a devolver, por un importe total de 11.650 millones€.
Aun así, y tal como analizan desde Cobee, plataforma digital europea de gestión de planes de beneficios de empleados de manera flexible y totalmente automatizada, en colaboración con TaxDown, si se compara con las cifras del año pasado, se observa que hasta un 2% de los contribuyentes españoles no realiza la Declaración de la renta, lo que supone que la Agencia Tributaria ingrese la cantidad que salga en el Modelo 100 -documento para poder hacer la devolución o ingreso del IRPF-, pero con una multa de 200€.
Los españoles consideran que pagan muchos impuestos
La declaración de la renta se ha convertido en un momento de gran importancia para la clase media o, en otras palabras, para los españoles que cobran menos de 60.000€ anuales, que asumen el 95% de los ingresos por IRPF. Esta situación es especialmente destacable ya que las cotizaciones a la Seguridad Social y el IRPF alcanzan ya el 39,5% del salario del trabajador medio español, un 14% por encima de la media de los países de la OCDE, que se sitúa en el 34,6%. Así, no es de extrañar que casi 4 de cada 10 personas consideren que pagan muchos impuestos y que un 59% asegure que recibe menos de la Administración de lo que paga en impuestos y cotizaciones, tal y como destaca un estudio realizado por el CIS.
En este contexto, Cobee indica en la última edición de su ebook ‘Manual Renta 2023’, los diferentes beneficios que aporta la retribución flexible a la hora de presentar la declaración de la renta, a la par que trata de poner un poco de luz ante posibles eventualidades que se puedan encontrar los contribuyentes.
Gracias a los planes de retribución flexible, una persona que reciba el salario promedio en España (1.898€ según la Agencia Tributaria) podría ahorrar alrededor de 1.025€ al año en su Declaración de la renta. La razón detrás de esto es que muchos de los beneficios sociales que las empresas ofrecen a sus empleados a través de estos planes no están sujetos a impuestos, lo que permite reducir significativamente las cargas que se deben pagar en el IRPF.
“La retribución flexible permite a los empleados acceder a una variedad de servicios y productos sin preocuparse por las implicaciones fiscales, lo que resulta en un ahorro significativo para ellos y sus familias. Además, el potencial de ahorro puede ser aún mayor, ya que la compensación en especie puede representar hasta el 30% del salario bruto de un individuo”, afirma Aranguren.