Miguel Ángel Valero
Como era previsible, el impuesto a la banca y la renuncia de José Ignacio Goirogolzarri a seguir como presidente de CaixaBank sin funciones ejecutivas marcaron la presentación de los resultados en los nueve primeros meses. El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha sido extraordinariamente duro con el gravamen, ya que "consagra, exagera y acelera la discriminación entre entidades". El anterior impuesto ya discriminaba porque dejaba fuera a pequeñas entidades y bancos extranjeros. El nuevo, si se termina aprobando en su actual redacción, introduce una progresividad que siempre se ha aplicado a las personas físicas, "pero no a las jurídicas".
"Somos los más grandes y los que pagaremos más. Podríamos llamarla 'tasa CaixaBank'. No me parece bien porque se discrimina a los grandes bancos. No está bien pensado y además no se incluyen deducciones, al tiempo que se nos pide que pongamos ofibuses y que mantengamos la presencia en pueblos para evitar la exclusión financiera", argumenta.
El CEO de CaixaBank subraya que este impuesto a quien perjudica es a los accionistas, especialmente a la Fundación La Caixa, que tiene un 35% del capital. Si CaixaBank tiene que pagar 500 millones en tasas, la Fundación dejará de ingresar 150 millones: "es un impuesto a la Obra Social". Pero también perjudica al Estado, que a través del Frob tiene el 18% de CaixaBank.
Además, la tasa, sobre la que ya se han pronunciado en contra AEB y CECA además de todos los CEO que han presentado resultados hasta ahora, tendrá consecuencias negativas para el crédito. "Es un desincentivo. No es algo tan visible como una inversión que se pierde", en alusión a las amenazas de las energéticas de frenar inversiones en España si se mantiene la tasa.
Gortázar lanza otro aviso: la tasa va a suponer un freno para que, en una eventual fusión transfronteriza en Europa, España se quede con la sede social (por motivos fiscales) de la futura entidad.
Y confirma que CaixaBank recurrirá el impuesto a la banca "si no se ajusta a Derecho".
Sobre José Ignacio Goirigolzarri, que dejará de ser presidente el 1 de enero de 2025 (Tomás Muniesa asumirá ese día la presidencia no ejecutiva del banco), Gortázar ha tenido encendidas palabras de elogio y de "reconocimiento a su labor": los ultimos cuatro años como principal ejecutivo del banco "han sido los más fructíferos de mi vida profesional" como consecuencia de la absorcion de Bankia en 2020. Una operacion "compleja" a lo largo de la cual "he tenido la cercanía y el apoyo" de Goirigolzarri. Destaca "la magnífica relación": "ha sido un placer. Nos hemos sumado y multiplicado y nuestra buena colaboración ha sido de inspiración para el grupo. Es una de las razones del éxito de la integración".
Y desvincula la decisión de Goirigolzarri de supuestas presiones del BCE en contra de las presidencias ejecutivas, ya que hay otros bancos, como el Santander o el BBVA, que las tienen. También señala que la vacante que deja el todavía presidente en el consejo de administración será ocupada por un independiente.
Un 16,1% más de beneficios
El Grupo CaixaBank obtiene un beneficio neto atribuido de 4.248 millones de euros entre enero y septiembre de 2024, un 16,1% más que en el mismo periodo del año anterior, gracias al fuerte crecimiento de la actividad. El Grupo, que presta servicio a 20,2 millones de clientes a través de una red de más de 4.100 oficinas en España y Portugal, supera los 635.000 millones en volumen de activos. La entidad consolida, además, su liderazgo en España y mejora en cuotas de mercado, lo que le permite desempeñar un rol clave en la contribución al crecimiento económico sostenible y en la inclusión financiera
“Hemos tenido un tercer trimestre que ha seguido la tendencia positiva de los seis primeros meses del año: intensa actividad comercial, morosidad contenida, solvencia y liquidez muy por encima de los requerimientos y una rentabilidad que ha alcanzado niveles razonables. El incremento de la actividad, apoyada en una intensa dinámica comercial, sigue ampliando el liderazgo de CaixaBank como banco de referencia en España. Los recursos de clientes han aumentado en 43.502 millones y la nueva producción de crédito sigue avanzando a muy buen ritmo, un 20% superior respecto al mismo periodo de 2023”, destaca Gortázar.
Los recursos de clientes alcanzan a finales de septiembre los 673.832 millones, tras registrar un aumento del 6,9% con respecto a diciembre de 2023. Los recursos en balance se sitúan en 487.167 millones de euros, un 5,1% más, gracias a la buena evolución del ahorro a la vista (+2,5%), el ahorro a plazo (+16,6%) y de los pasivos por contratos de seguros (+6%). Por su parte, los activos bajo gestión se incrementan un 10,8% en el año, hasta los 178.134 millones, con alzas del 12,4% en fondos de inversión, carteras y sicav’s, y del 6,6% en planes de pensiones
.En lo que va de año se ha realizado una intensa actividad comercial en productos de gestión patrimonial. Así, las suscripciones netas de fondos de inversión, seguros de ahorro y planes de pensiones mantienen el ritmo de crecimiento, para alcanzar los 8.777 millones, lo que supone un aumento del 54,3% y ha permitido mejoras en las cuotas de mercado en estos productos.
En cuanto al crédito, la cartera sana se sitúa en 344.678 millones a cierre de septiembre y muestra un ligero incremento del 0,2% en el año, en un entorno de buen comportamiento de la nueva producción de crédito en todos los segmentos.
De esta manera, la nueva producción hipotecaria se sitúa en 10.343 millones entre enero y septiembre, un 55% más en tasa interanual, y con alrededor del 75% del total concedido a tipo fijo. Sobre el conjunto de la cartera hipotecaria, casi el 40% está a tipo fijo, fórmula que permite a los clientes saber desde el primer momento cuánto pagarán cada mes durante toda la vida del crédito sin estar sujetos a las fluctuaciones de los tipos de interés.
En lo que se refiere a crédito al consumo, se concedieron 9.021 millones en los nueve primeros meses del ejercicio, lo que representa un incremento del 15%. En empresas, la nueva producción alcanzó 31.548 millones, un 14% más. En el segmento de pymes se firmaron entre enero y septiembre un total de 124.633 operaciones (+25%).
El margen de intereses alcanza en los nueves primeros meses del ejercicio 8.367 millones, lo que supone un aumento del 13,6% en comparación con el mismo periodo del año anterior, apoyado en la intensa actividad comercial y el entorno de tipos de interés. En tasa intertrimestral, el margen se mantiene prácticamente estable (+0,1%). Por su parte, los ingresos por servicios (gestión patrimonial, seguros de protección y comisiones bancarias) se incrementan un 3,8%, hasta 3.674 millones. En detalle, los ingresos por gestión patrimonial crecen un 12,4% por el incremento de volúmenes favorecidos por la evolución del mercado y la intensa actividad comercial, y los ingresos por seguros de protección aumentan un 6%, si bien las comisiones bancarias disminuyen un 3,6% en el periodo.
El crecimiento del margen bruto, con un alza del 10,3% en tasa interanual (hasta 11.793 millones de euros entre enero y septiembre), superior al de los gastos de administración y amortización recurrentes (+4,5%, hasta 4.563 millones), permite el crecimiento del margen de explotación, que se sitúa a cierre de septiembre en 7.230 millones (+14,5%).El notable impulso de la actividad y la rigurosa gestión del riesgo se reflejan en todos los márgenes de la cuenta de resultados de CaixaBank, con mejoras, además, en rentabilidad y eficiencia: la rentabilidad sobre fondos propios (ROE) se sitúa en el 14,4% a cierre de septiembre y la eficiencia, en el 39,2%.
El saldo de dudosos vuelve a caer un trimestre más y acumula un descenso de 164 millones en lo que va de año, para situarse en 10.352 millones a finales de septiembre, gracias a una gestión activa del riesgo, con una tasa de morosidad que se mantiene en el 2,7% y una ratio de cobertura que se sitúa en el 71%.
Atractiva retribución al accionista
Con cargo al ejercicio 2024, el Consejo de Administración de CaixaBank acordó en febrero un plan de dividendos consistente en una distribución en efectivo de entre el 50% y el 60% del beneficio neto consolidado, que se abonaría mediante dos pagos en efectivo: un dividendo a cuenta a abonar en noviembre por importe de entre el 30% y el 40% del beneficio neto consolidado correspondiente al primer semestre de 2024, y un dividendo complementario a abonar en abril de 2025, sujeto a aprobación final por parte de la Junta General de Accionistas.
De acuerdo con dicho plan, el Consejo de Administración ha aprobado la distribución de un dividendo a cuenta del 40% del beneficio neto consolidado del primer semestre de 2024, por un importe de 1.070 millones (14,88 céntimos brutos por acción), pagadero en noviembre.
Además, CaixaBank ha anunciado un quinto programa de recompra de acciones por 500 millones , que se iniciará a partir del 19 de noviembre y que tendrá una duración máxima de seis meses desde la fecha de inicio. Así, los programas de recompras de acciones anunciados en el marco del Plan Estratégico 2022-2024 suman 3.800 millones.
Con todo ello, el Grupo reafirma su compromiso con una atractiva política de retribución al accionista y con distribuir 12.000 millones dentro del actual Plan Estratégico, de los que ya tiene comprometidos -entre iniciativas realizadas, en ejecución y anunciadas- cerca de 9.500 millones.
Sobre el nuevo Plan Estratégico 2025-27, el consejero delegado de CaixaBank declina ofrecer un solo dato y remite a la presentación que se realizará el 19 de noviembre con motivo del Investor Day de la entidad.