Los aranceles dejarán al Euribor por debajo del 2,5%

Miguel Ángel Valero

Ebury, la fintech global especializada en pagos internacionales e intercambio de divisas, cree que el Euribor puede ralentizar su escalada hacia el 2,5%. Diego Barnuevo, analista de Mercados de la fintech, explica que la contención del Euribor se debe a varios factores, “una economía europea que sigue crónicamente estancada, y la amenaza de los aranceles estadounidenses, que no se ha disipado”. 

Por otro parte, considera que “la inflación sigue obstinadamente por encima del objetivo del BCE, y no está claro que unos tipos excesivamente elevados sea lo que esté frenando la economía europea”. Todo ello le lleva a vaticinar que, “si no se producen grandes sorpresas, es probable que el Euribor se mantenga cerca de los niveles actuales”. 

El Euribor a 12 meses ha reaccionado con un repunte esta semana, y se sitúa en el 2,477%, tras publicarse los datos del PIB de la zona euro correspondientes al cuarto trimestre de 2024, que sorprendieron ligeramente al alza. El PIB creció un 0,1% respecto al trimestre anterior, algo por encima de la previsión que se esperaba de un crecimiento nulo. El 21 de febrero se han conocido los datos preliminares del índice de gestores de compras (PMI) de la zona euro, que se ha mantenido constante en 50,2. Este dato ha quedado por debajo de la previsión de 50,5, pero supone el segundo mes consecutivo del índice en zona expansiva (es decir, por encima de 50). El Euribor puede reaccionar ralentizando su  escalada hacia el 2,5%.

XS.com: el euro/dólar puede alcanzar el 1,1

Por su parte, Antonio Di Giacomo, analista de Mercados Financieros para LATAM en XS.com, asegura que "el mercado de divisas se encuentra en constante evolución, y uno de los pares más seguidos, el EUR/USD, podría estar en camino de superar las expectativas actuales. Aunque el consenso del mercado sitúa el tipo de cambio a mantenerse en la zona de 1.05 para este 2025, las proyecciones más recientes sugieren que el par podría alcanzar el nivel de 1.10". 

A pesar de enfrentar posibles desafíos en el corto plazo, se espera que el euro gane fuerza a medida que el año avance, impulsado por factores tanto económicos como geopolíticos. En los primeros meses de 2025, el dólar puede mantener su fortaleza inicial, impulsado por datos económicos sólidos y una política monetaria restrictiva por parte de la Reserva Federal. 

Sin embargo, a medida que avance el año, se espera un debilitamiento gradual del dólar. La posible desaceleración del crecimiento económico en Estados Unidos y un posible cambio en la política monetaria puede abrir la puerta a una apreciación del euro frente al dólar. Existen varios factores de riesgo subestimados que podrían jugar a favor del euro. Entre ellos, una posible solución del conflicto creado por la invasión rusa de Ucrania puede generar un impulso significativo en la confianza del mercado europeo. 

Las elecciones en Alemania pueden tener un efecto determinante sobre la dirección política y económica del país, afectando indirectamente al euro. Finalmente, las reformas en la Unión Europea, enfocadas en fortalecer la integración económica y fiscal, pueden mejorar el atractivo del euro para los inversores globales. 

A pesar de la volatilidad que podría presentarse a lo largo del año, el euro cuenta con argumentos sólidos para apreciarse. La sobrevaloración del dólar, que ha sido un factor persistente en los últimos años, podría corregirse, ofreciendo espacio para que el EUR/USD suba. Además, las incertidumbres en torno al crecimiento económico de EEUU podrían debilitar el dólar, mientras que datos positivos desde la Eurozona pueden generar un impacto favorable para el euro.

El entorno económico global también jugará un papel clave en el comportamiento del EUR/USD. La evolución de la inflación en ambas regiones, junto con las decisiones de política monetaria del Banco Central Europeo y la Reserva Federal, será crucial para determinar la dirección del par. Un enfoque más restrictivo por parte del BCE, combinado con una política más flexible de la Fed, puede acelerar el avance del euro frente al dólar en los meses finales de 2025. 

"En definitiva, aunque el camino del EUR/USD hacia el nivel de 1.10 podría ser desigual y estar lleno de desafíos, los factores fundamentales sugieren un escenario más optimista de lo que actualmente estima el consenso del mercado. Si los riesgos subestimados se materializan y el contexto económico global favorece a la eurozona, no sería descabellado pensar que el euro cierre el año con una fortaleza renovada frente al dólar. En conclusión, el pronóstico de un EUR/USD alcanzando el nivel de 1.10 para finales de 2025 desafía las previsiones más conservadoras. Aunque el dólar podría mantener su fortaleza a corto plazo, los riesgos geopolíticos, las reformas estructurales en Europa y la posible desaceleración económica en Estados Unidos podrían allanar el camino para una apreciación del euro. A medida que se desarrollen estos factores, los inversores deberán mantenerse atentos a las oportunidades que puedan surgir en este escenario cambiante", señala este experto. 

Pepperstone: señales de cautela institucional en cripto

Por su parte, Quasar Elizundia, Estratega de Investigación de Mercados en Pepperstone, destaca que el bitcoin extiende su impulso alcista respaldado por un mayor apetito de riesgo en el frente de criptoactivos, encadenando tres sesiones consecutivas de ganancias y encaminándose a finalizar la semana en terreno positivo tras tres semanas bajo presión. Actualmente, cotiza en torno a los 99.000$ lo que refuerza la percepción de que, pese a la volatilidad reciente, los inversores aún mantienen apoyo e interés en los criptoactivos.

No obstante, se observan señales de cautela desde el frente institucional. Esta semana, los fondos cotizados (ETF) de bitcoin registraron retiros significativos, con 364 millones$ el jueves 20 de febrero y un total de 490 millones en lo que va de la semana. Este comportamiento sugiere que algunos participantes institucionales prefieren mantenerse al margen ante la incertidumbre macroeconómica.

Un factor relativamente positivo proviene del frente de derivados, donde las liquidaciones de posiciones cortas superan con creces a las largas, lo que indica que los operadores han cerrado sus exposiciones bajistas al verse presionados por el alza reciente. Paralelamente, el interés abierto subió 7.2% hasta alcanzar los 35.200 millones$, impulsado en su mayoría por posiciones largas.

En el plano monetario, la postura restrictiva de la Reserva Federal continúa moderando el potencial de bitcoin. Comentarios de parte de miembros de la Fed reafirmando la intención de mantener los tipos en un rango de 4,25%-4,5%, mantienen la presión sobre los activos de mayor riesgo. Este contexto de tipos elevadas limita el atractivo de activos considerados de mayor riesgo, lo cual afecta el desempeño del bitcoin y de acciones ligadas a los criptoactivos.

Este experto también resalta que “la volatilidad en el mercado petrolero se ha intensificado durante la jornada de cierre de semana, con los futuros del crudo registrando descensos significativos que prácticamente anulan las ganancias acumuladas en la semana. El West Texas Intermediate (WTI), referencia estadounidense, experimentó una caída cercana al 2.2%, impulsada principalmente por factores geopolíticos y datos de oferta que han sorprendido a la baja. En particular, las presiones de la administración de Estados Unidos sobre el gobierno de Irak para reiniciar la exportación de crudo kurdo hacia Turquía han sido uno de los catalizadores más relevantes, al crear incertidumbre en los flujos de suministro".

Los datos publicados por la Administración de Información de Energía refuerzan la tendencia bajista. El incremento de 4.6 millones de barriles en los inventarios de crudo sugiere una demanda interna más débil de lo esperado, lo cual presiona aún más a la baja los precios. Sin embargo, no todo es pesimismo: las existencias de gasolina se redujeron 0.2 millones de barriles y los destilados cayeron 2.1 millones de barriles, lo que podría sostener el valor de estos productos refinados de manera temporal.

En el plano geopolítico, la presión ejercida por Washington para reactivar el oleoducto que conecta los yacimientos kurdos con Turquía y frenar el contrabando hacia Irán marca un nuevo capítulo en la política de “máxima presión” de Estados Unidos contra Teherán. Aunque el ministro de Petróleo de Irak anunció la reanudación de las exportaciones kurdas en los próximos días, de momento todavía hay incertidumbre en cuanto a obstáculos técnicos y financieros que podrían retrasar su implementación. 

Un repunte inmediato en la oferta, proveniente de estos barriles bloqueados, presionaría a la baja los precios; sin embargo, cualquier contratiempo político o el estancamiento de las negociaciones de paz en otras regiones clave podría impulsar un rebote.

"En resumen, el panorama petrolero continúa caracterizándose por una alta volatilidad, reflejo de la interacción constante entre datos de oferta y demanda, así como de las tensiones geopolíticas", señala.