15 Aug
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Miguel Ángel Valero

Su impresionante trayectoria en el sistema financiero español queda empañada por sus líos con la justicia, ignorados en el comunicado oficial de Bankinter. Jaime Botín, que ha fallecido en Santander a los 88 años, fue condenado a 3 años de cárcel (que no cumplió debido a su avanzada edad y a su delicado estado de salud) y a 91,7 millones€ de multa por un delito de contrabando de un bien del patrimonio histórico español. El 30 de julio de 2015, el expresidente de Bankinter sacó de España, a través de su goleta Adix, el cuadro de Picasso Cabeza de mujer joven, pintado en 1906 por el artista malagueño y adquirido por el banquero en 1977. Fue incautado en el puerto de Calvi (Córcega) por las autoridades francesas tras comprobar que carecía de la preceptiva autorización administrativa para su salida de territorio español.

Unos años antes, el 6 de octubre de 2017, el máximo accionista de Bankinter (a través de la sociedad patrimonial de la familia Cartival) aceptaba la condena por un delito contra la Hacienda Pública en la compra de un avión privado a través de un entramado de sociedades en Portugal y Jersey en 2012. Previo pago de la multa del 50% de la cuota defraudada (cifrada por la Fiscalía en 1.014.298€), lograba que la pena, que oscilaba de dos a seis años de prisión, se quedara en ocho meses. Evitaba así el ingreso en prisión, al ser la pena inferior a dos años y carecer de antecedentes penales.

Pero esos problemas judiciales y fiscales, acaecidos cuando ya no era presidente del banco, no pueden hacer olvidar el papel de Jaime Botín en la construcción de Bankinter. Nacido en Santander (la misma ciudad en la que falleció el 15 de agosto de 2024) en abril de 1936 dentro de "una larga y acreditada saga de banqueros", ingresó en el Santander, banco presidido por su padre, Emilio Botín Sanz de Sautola, en 1957. 

Participó, junto a su hermano Emilio (ya fallecido, y padre de la actual presidenta, Ana Botín) en la espectacular expansión de la entidad, que pasó de ser la segunda más pequeña entre los grandes bancos a ser la mayor (absorbiendo, entre otros, Banesto, Central Hispano). Fue vicepresidente primero del Santander entre 1999 y julio de 2004.

En junio de 1965 participa en la creación del Banco Intercontinental Español, una alianza en banca industrial entre el Santander y Bank of America. Allí fue consejero director general (hasta 1977); consejero delegado (hasta 1986), presidente (hasta marzo de 2022), y hasta su muerte, máximo accionista a través de Cartival (23,19% del capital). En 1972, ya como Bankinter y como banco comercial (muy centrado en Empresas y Banca Privada) y sin Bank of America, la entidad debuta en la Bolsa de Madrid.

"Jaime Botín ha sido el principal artífice del carácter innovador e independiente de Bankinter, impulsor de la evolución que ha llevado al banco a constituirse en una de las principales entidades de España y creador de una personalidad diferencial que ha definido al banco a lo largo de toda su historia", destaca el comunicado del banco.

Creador de Línea Directa

En 1995, el presidente de Bankinter impulsa Línea Directa Aseguradora, una alianza entre el banco y Direct Line, la aseguradora del Royal Bank of Scotland. Como en el caso de Bankinter, compró en 2009 todo el capital de Línea Directa que no controlaba, aprovechando la nacionalización de la entidad financiera británica. Jaime Botín fue su presidente hasta 2005. Hasta su salida a Bolsa en abril de 2021, la aseguradora siempre formó parte del Grupo Bankinter.

"En los años 90, vio la posibilidad de desarrollar en España una compañía de seguros de fuerte base tecnológica, totalmente disruptiva en cuanto al modelo de negocio, vendiendo seguros de coche directamente al cliente a través del teléfono y posteriormente por internet, sin intermediarios ni redes de oficinas. Junto con Peter Wood, creador de Direct Line Insurance, introdujo en España este modelo de negocio con la creación de Línea Directa, que tuvo una extraordinaria acogida entre los clientes y se convirtió rápidamente en un gran éxito empresarial. Como principal accionista y presidente de la entidad, Jaime Botín fue el gran valedor del carácter innovador y el enfoque digital de la compañía, lo que ha llevado a Línea Directa a situarse en la actualidad como una compañía multiproducto que opera en los ramos de los seguros de Automóvil, Hogar y Vida, con más de 3,3 millones de clientes", explican en la aseguradora.

Tras la salida a Bolsa de la aseguradora, que supuso desvincularse de Bankinter (que sigue en el capital), Cartival es el mayor accionista.

Liderazgo natural y visión estratégica a largo plazo

"Librepensador, amante de la filosofía y la literatura, poseedor de una amplia cultura clásica, Jaime Botín gozaba, asimismo, de un liderazgo natural y de una visión estratégica a largo plazo. Bajo su mandato, Bankinter se transformó en una de las entidades financieras más innovadoras de España, adoptando las últimas tecnologías en su aplicación al negocio bancario y a sus modelos de distribución y de relación con los clientes, y siempre con el foco puesto en la creación de empleo y valor accionarial", destacan en el banco. 

"Su visión clarividente y anticipatoria de lo que iba a deparar el futuro de las finanzas le llevó a apostar por estrategias que, a la postre, se han convertido en cruciales en el devenir del sector financiero, como la rigurosidad en la gestión de los riesgos o la apuesta por la tecnología y el uso de los canales a distancia, en detrimento de las extensas redes de oficinas", añaden.

“Bankinter ha desarrollado tecnologías de gestión integrada que nos deben permitir aprovechar, con ventaja sobre nuestros competidores, el nuevo entorno de comunicaciones e información, de manera que en los próximos tiempos nos convirtamos en el auténtico banco del siglo XXI que muchos, supongo, querrán ser pero que muy pocos podrán, con realismo, optar a ser. Y aquí debo decir que aquel que lo consiga, rompiendo con los moldes tradicionales y consolidando una nueva y más eficiente manera de hacer banca, dejará pronto atrás a los demás”, proclamaba Jaime Botín  en la junta general de accionistas de 1995.

En la junta de 2024, celebrada el 21 de marzo, Jaime Botín aprovechó el turno de intervención de los accionistas para proclamar que estaba "muy orgulloso" de la labor realizada por la CEO y actual presidenta no ejecutiva, María Dolores Dancausa, y del todavía presidente, Pedro Guerrero, "con mano suave" pero "con criterio determinante". Fue la última intervención pública como expresidente del banco que fundó.

Jaime Botín deja cinco hijos, de los que dos están en el consejo de administración de Bankinter (el vicepresidente ejecutivo, Alfonso Botín-Sanz de Sautuola y Naveda, y Marcelino, consejero dominical).

El cuerpo de Jaime Botín será trasladado mañana, viernes, a las 10:00 horas a la casa familiar de El Promontorio, en la Avenida Pérez Galdós, 32, en Santander, y sede actualmente de la Fundación Botín, donde será velado. El entierro se celebrará al día siguiente en la más estricta intimidad.

María Dolores Dancausa, presidenta no ejecutiva de Bankinter, asegura que "la historia de éxito de nuestro banco no se entendería sin la enorme aportación personal y profesional de Jaime Botín a lo largo de toda su vida. Desde su creación impulsó como pilares de la empresa el talento de las personas y la importancia de la tecnología, esenciales para la innovación y la diferenciación de sus competidores, así como para estar cercano a sus clientes y tener una firme orientación a la rentabilidad, que es precisamente el elemento que permite todo lo anterior".

"Hoy ha fallecido mi tío Jaime Botín. Fue una de las figuras más relevantes en la modernización del sistema financiero español, especialmente en Bankinter, su gran obra desde su fundación en 1965. Tuve la suerte de compartir con él quince años en el Consejo y Ejecutiva del Santander, donde fue consejero de 1960 a 2004 y vicepresidente muchos años. Tenía mucho de mi abuelo: multifacético, con gran sentido del humor e interesado, no solo por lo financiero, sino por un amplio humanismo: el arte, la física, la filosofía, el deporte. En las reuniones del banco hablaba poco, pero sus intervenciones no tenían desperdicio. Aprendí mucho de él y de cómo enfrentaba los retos, tanto personales como profesionales; con enorme sabiduría. Fue un gran apoyo primero para mi abuelo, después para mi padre y también para mí en momentos importantes de mi carrera. Mi tío Jaime siempre aportaba valor y lo hacía con enorme discreción. Nunca olvidaré su inteligencia e independencia de criterio. Descanse en paz", escribe en LinkedIn Ana Botín.

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