Miguel Ángel Valero
'Comunicación y empresa, un binomio de éxito. Medio siglo de comunicación empresarial en España' (Profit, 342 páginas) es obra de Carlos Díaz Güell, uno de los mejores directores de Comunicación que ha tenido el Banco de España (con Jaime Caruana como gobernador), en durísima pugna con Víctor Márquez (Luis Linde y Pablo Hernandez de Cos al frente de la institución).
Doctor en Ciencias de la Información, profesor, redactor de Economía en El País, fundador y director de La Economía 16, creado y director de Estudio de Asesores, director de Comunicación de Iberia, y seguro que me dejo algún cargo más, el autor de esta obra lo ha sido todo en periodismo y comunicación.
El prólogo lo escribe el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, que aporta sobre todo una cita de Oscar Wilde: "Hay solamente una cosa en el mundo peor que hablen de ti, y es que no hablen de ti".
Carlos Díaz Güell acierta en la definición precisa de comunicación: "consiste en que alguien diga algo a alguien a través de un canal y con un resultado, por muy intangible que sea".
Pero cuidado porque "se puede llegar al absurdo de entender que noticia es todo aquello que gira en torno a lo que la empresa está interesada en ocultar y por lo tanto las buenas noticias no son noticia".
Aunque el autor recuerda la cita de George Orwell: "Periodismo es publicar algo que molesta a alguien. Todo lo demás es relaciones públicas".
Una definición de comunicación que contrasta con el rumor, "que no puede pasarse por alto porque existe; no puede ser eliminado; se hace viejo, pero no desaparece; tiene un gran potencial de distorsión; tiene un alto grado de credibilidad; exagera; se extiende y es la forma de comunicación más rápida y eficiente, aunque especialmente negativa y dañina". "Lo que más perjudica la imagen de algo o alguien es el rumor, y contra el rumor lo mejor es la información veraz y constante", señala Carlos Díaz Güell.
Una de las aportaciones del libro es el análisis de los 11 principios de Joseph Goebbels, padre de la teoría de la propaganda de Hitler y, nos guste o no, base de la comunicación política actual (páginas 200-201): "si no puedes negar las malas noticias, inventa otras que las distraigan".
Pero el mejor consejo es el que aporta Warren Buffett: "La única manera fácil de llegar a valer más es perfeccionando las habilidades de comunicación. Si no puedes comunicarte, es como guiñarle un ojo a alguien en la oscuridad; no pasa nada. Puedes tener toda la capacidad intelectual del mundo, pero tienes que ser capaz de transmitirla".