En regiones áridas y desérticas, donde cada gota cuenta, la gestión eficiente del agua no solo es esencial para la supervivencia, sino también para el desarrollo económico y la prosperidad compartida entre estados y países. En estos momentos de escasez y estrés hídrico, el agua se erige como un recurso vital que trasciende fronteras políticas y divide naciones. Según el informe sobre el agua publicado en marzo de este año por la Unesco y ONU-Agua, de los 153 países que comparten ríos, lagos o aguas subterráneas, solo 31 han alcanzado acuerdos de cooperación que cubren al menos el 90% de la superficie de sus cuencas transfronterizas.
Este dato resalta la necesidad de fortalecer la cooperación internacional en la gestión sostenible de los recursos hídricos compartidos, ya que el agua es un recurso vital y su gestión eficaz es crucial para el desarrollo sostenible y la paz entre estados.
El concepto de "agua para la prosperidad compartida" abandera la décima edición del World Water Forum, que se celebrará hasta el sábado 25 de mayo en Bali (Indonesia) y se refiere a la idea de que el acceso equitativo y sostenible al agua es fundamental para el desarrollo y el bienestar de las comunidades.
Este enfoque reconoce que el agua es un recurso crucial no solo para la supervivencia humana, sino también para la agricultura, la industria, la energía y el medio ambiente, como aseguró el presidente de Indonesia, Joko Widodo, en el acto de inauguración de este evento que congrega a más de 30.000 participantes de 172 países: "El papel del agua es fundamental para la vida humana. El Banco Mundial calcula que la escasez de agua podría frenar el crecimiento económico en un 6% de aquí a 2050. La escasez de agua también puede desencadenar guerras y ser fuente de catástrofes. Tanto demasiada agua como muy poca agua pueden ser un problema para el mundo”.
“Desde el Foro de la Economía del agua entendemos que, para lograr la prosperidad compartida a través del agua, se necesitan políticas y prácticas que promuevan la gestión sostenible de los recursos hídricos, la distribución justa del agua entre diferentes usuarios y la protección de los ecosistemas acuáticos. Esto implica la participación de diversos actores, incluidos gobiernos, empresas, organizaciones sin fines de lucro y comunidades locales”, asegura el presidente del Foro de la Economía del Agua, Francisco Lombardo. “Agua para la prosperidad compartida es garantizar el acceso equitativo y sostenible alagua y así fomentar el desarrollo económico, social y ambiental de manera inclusiva y equitativa”, resalta.
Mantener el agua en un lugar destacado de la agenda política mundial es imprescindible para afrontar los desafíos a los que nos enfrentamos como sociedad y para implementar nuevas oportunidades, que transitan por la regeneración de un recurso de manera mássostenible.
Elon Musk, que participó en el Foro inaugurando los servicios de sus satélites Starlink para dar cobertura de internet a toda Indonesia, expresó su optimismo por el avance tecnológico y aseguró que el problema del acceso a agua potable en el mundo se puede resolver con desaladoras alimentadas por energía solar.
En este sentido, el Foro de la Economía del Agua recuerda que España ha hecho de la necesidad virtud en lo que a creación de suministros de agua sostenibles se refiere. En materia de regeneración y reutilización, es el país que más agua reutiliza en Europa y el quinto del mundo, con una ratio de reciclaje de entre el 7% y el 13%, lo que supone un ahorro de 500 hm3de agua al año.
Estamos lejos aún de los 4.000 hm3 que podrían reutilizarse si se tratara la totalidad de agua de consumo humano empleada en España, ya que solo el 27% de nuestras EDAP realiza tratamientos terciarios aptos para la reutilización y están fundamentalmente concentradas en las demarcaciones hidrográficas del Júcar y del Segura, pero el camino ha comenzado a recorrerse.
Los últimos estudios y experiencias demuestran que el desarrollo tecnológico actual permite adecuar el agua reutilizada a todos los usos, incluyendo el suministro de agua potable. En España, el agua regenerada se emplea actualmente para otros procesos que requieren una calidad menor y que permiten liberar agua de primer uso para el consumo humano, pero ya disponemos de la tecnología que permite regenerar agua de calidad suficiente para beber.
En este contexto el Foro de la Economía del Agua recuerda que el agua regenerada es una herramienta estratégica que hay que priorizar para acercarnos a la consecución de los objetivos de desarrollo sostenible, que subrayan la necesidad de garantizar el acceso sostenible al agua y la energía para todos y reconocen su papel crítico en la erradicación de la pobreza y la promoción del desarrollo sostenible. Además, el Acuerdo de París sobre el cambio climático destaca la importancia de impulsar la transición hacia un modelo energético bajo en carbono y resiliente al cambio climático. En un mundo marcado por la urgencia climática y la necesidad de un desarrollo sostenible, el agua y las nuevas energías se alzan como pilares fundamentales para un futuro resiliente y equitativo.