Miguel Ángel Valero
El fracaso, por segunda vez en cuatro años, del intento de compra del Banco Sabadell por parte del BBVA, puede generar un terremoto en el mapa bancario de España. La OPA hostil del Banco de Bilbao sobre Banesto en 1987 fracasó pero agitó el sistema financiero español hasta el punto de cambiarlo radicalmente: el Santander se terminó quedando con la entidad intervenida tras la nefasta gestión de Mario Conde, y con el grupo resultante de la fusión entre el Central y el Hispano, y finalmente logró el Popular tras la adjudicación por el BCE, para consolidarse como el mayor banco en España y en Europa; el Bilbao se fusionó con el Vizcaya en el BBV tras una tormentosa integración y terminó siendo controlado por Francisco González, que propició la unión con Argentaria. Solo Bankinter se ha mantenido al margen de las fusiones durante este período.
Para Manuel Pinto, analista de XTB, "parece clara la estrategia que quiere seguir BBVA, al intentar potenciar su negocio en España". "Los bancos de España, y en general del sur de Europa, han superado a sus homólogos del norte en los últimos dos trimestres, algo que está ocurriendo en términos generales también en la economía, gracias entre otras razones al aumento del turismo, el auge de las exportaciones y los precios más bajos de la energía gracias a las energías renovables y la limitada dependencia del gas ruso", argumenta.
En el caso de BBVA "no descartamos nuevos intentos de conseguir su objetivo a través de algún movimiento con otras entidades, en caso de confirmarse el fin de las negociaciones con Sabadell", apunta. "Sería por ejemplo el caso de Bankinter, que podría ser uno de sus objetivos, dado que podrían aprovechar la pérdida de crecimiento de sus ingresos en España, concretamente en el margen de intereses, algo que por el contrario si hace en Portugal. Sin embargo, en nuestro país crece considerablemente en los recursos de clientes o en su unidad de banca de empresas, además el coste de este movimiento sería inferior. Actualmente Bankinter cuenta con una capitalización de mercado de 6.600 millones€ (mientras que Sabadell cuenta con una capitalización de 10.000 millones) y cuenta con menos de un tercio de oficinas y empleados que Sabadell", destaca.
"Unicaja podría ser objetivo de ambas entidades. Mientras que, para Sabadell, le permitiría recortar terreno con los tres grandes de nuestro país, para BBVA cumpliría algunos puntos interesantes, dado su exposición en España y el crecimiento de los márgenes de la cuenta de resultados a doble dígitos", explica.
"Desde XTB no descartamos que BBVA mejore su oferta inicial. En estos momentos parece que las partes se encuentran lejos de un posible entendimiento, pero la entidad presidida por Carlos Torres todavía tiene cierto margen de maniobra, mejorando su oferta inicial con una parte en efectivo, sin afectar a sus ratios financieros a futuro. Además, este movimiento ofrecería credibilidad a la entidad y a la posición de Carlos Torres, además de ofrecer seguridad a los accionistas de Sabadell, que dados los movimientos del mercado de los últimos días han desconfiado de la oferta inicial. Es un movimiento que nos parece que tendría grandes beneficios para ambas entidades, aprovechando la coyuntura económica actual", añade.
"Sabadell ya rechazó la primera oferta de compra en 2020 y no se puede negar que ha generado gran valor en solitario, multiplicando su valoración, aprovechando las subidas de tipos del BCE iniciadas en 2022, que le ha permitido mejorar su margen de intereses en mayor medida que la media del sector. Sin embargo, en junio podríamos empezar a ver un cambio de política monetaria por parte del organismo presidido por Christine Lagarde, que ponga en duda el crecimiento a futuro de las compañías con mayor ponderación de sus resultados en la región, como es el caso de Sabadell", avisa.
"En cualquier caso, BBVA tiene más opciones encima de la mesa para poder crecer en España y podría mirar a Bankinter o Unicaja como futuros objetivos en el caso de retirarse de este movimiento, dejando a Sabadell muy lejos de las grandes entidades del país", concluye.
Carlos Torres anuncia una inversión de 4.454 millones en México
De momento, el presidente del BBVA se 'olvida' del Sabadell en la Reunión Nacional de Consejeros Regionales 2024, el evento más importante del grupo en México, en el que ha anunciado una inversión de 4.454 millones€, muy por encima de lo previsto en el plan estratégico 2019-24. Destaca que "México es un gran país, con enorme potencial para aprovechar las oportunidades que surgen del nuevo orden mundial y la creciente regionalización, apalancándose en tendencias clave como la innovación y la sostenibilidad" y que el grupo cuenta con más de 30 millones de clientes allí.
Vaticina un crecimiento en torno al 2,5% para este año, impulsado por el consumo interno -apoyado por un mercado laboral fuerte y las remesas- y el aumento de la inversión. Además, la reconfiguración global de las cadenas de suministro sitúan a México como el ‘hub’ ideal para la manufactura y los servicios derivados del ‘nearshoring’, con importantes inversiones internacionales.
“El ‘nearshoring’ comienza a ser una realidad. En 2023 México ya se ha convertido en el primer socio comercial de EEUU, superando a China, con una clara previsión de que incrementará aún más su cuota en los próximos años. Además, las empresas están aumentando su capacidad productiva en México para aprovechar el ‘nearshoring’. Prueba de ello es el crecimiento exponencial en la construcción de parques industriales, que están ocupados casi en su totalidad”, subraya.