UBP ve interés en los bonos corporativos emergentes

El estudio de UBP "Explorando los Bonos Corporativos de Mercados Emergentes" recuerda que estos activos han enfrentado considerables desafíos en los últimos años, debido a las crecientes tensiones geopolíticas, los incumplimientos en el sector inmobiliario de China y las elevadas tasas de interés globales, lo que ha reducido el interés de los inversores. Sin embargo, la situación puede estar cambiando. Un cambio en el entorno de tasas de interés globales, marcado por un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal de EE. UU. y un nuevo paquete de estímulo económico en China, ofrece una oportunidad para reevaluar esta clase de activos, a menudo subestimada.

Apostolos Bantis, Investment Specialist, EM Fixed Income, Filipe Alves Da Silva, Head of Fixed Income Advisory & Strategy y Nicolas Laroche, Global Head of Advisory & Asset Allocation, subrayan que los fundamentos subyacentes de los emisores corporativos de mercados emergentes siguen siendo sólidos. Las empresas del sector continúan mostrando un bajo apalancamiento y tasas de incumplimiento históricamente bajas, lo que proporciona una base sólida, a pesar de incertidumbres más amplias en torno al comercio global y el crecimiento económico.

Esta clase de activos ha crecido sustancialmente en la última década: de 0,6 billones$ en 2008 a 2,5 billones en la actualidad, hasta superar ahora en tamaño al mercado de alto rendimiento de EE. UU. La mayoría de los bonos en este segmento son de grado de inversión; sin embargo, persisten conceptos erróneos sobre los riesgos crediticios y la liquidez, especialmente en comparación con los bonos soberanos de mercados emergentes.

Los ejemplos de Argentina y Turquía ilustran la resiliencia de los emisores corporativos incluso bajo estrés financiero soberano, destacando la importancia de un análisis detallado y desde abajo hacia arriba para identificar oportunidades.

Aunque el estrechamiento de los diferenciales de los bonos de mercados emergentes puede ser limitado, se espera que éstos se mantengan estables. Esta estabilidad desplaza el enfoque de los rendimientos hacia el “carry trade” y los movimientos de las tasas de interés, más que hacia las ganancias por precio. En este contexto, los bonos corporativos de mercados emergentes presentan una oportunidad atractiva, ofreciendo un diferencial de rendimiento significativo sobre los bonos de grado de inversión de EE. UU., respaldado por condiciones de mercado en mejora y sólidos fundamentos de los emisores.

Puntos clave:

  • Los bonos corporativos de mercados emergentes han enfrentado desafíos en los últimos años, lo que ha llevado a muchos inversores a evitar esta clase de activos.
  • El reciente cambio en el ciclo global de tasas de interés, junto con el nuevo estímulo monetario y fiscal de China, presenta una oportunidad oportuna para reevaluar los bonos corporativos de mercados emergentes.
  • Los fundamentos de los emisores de bonos corporativos de mercados emergentes son sólidos, caracterizados por un bajo apalancamiento, tasas de incumplimiento históricamente bajas y una predominancia de emisores de grado de inversión.
  • Existen riesgos relacionados con la posibilidad de nuevos conflictos comerciales que puedan afectar el crecimiento global y la inflación; sin embargo, el escenario anticipado de una desinflación suave podría ayudar a mantener bajas las tasas de incumplimiento corporativo en mercados emergentes y aumentar la demanda de los inversores por rendimientos más altos.
  • Los diferenciales de los bonos corporativos de mercados emergentes tienen un margen limitado para comprimirse, pero anticipamos que se mantendrán estables, con rendimientos impulsados principalmente por el “carry trade” y las tasas de interés.
  • A pesar de los estrechos márgenes actuales de los diferenciales de los bonos, esta clase de activos ofrece un diferencial valioso tanto frente a los bonos de grado de inversión como a los de alto rendimiento de EEUU: