Miguel Ángel Valero
"China está en una encrucijada, marcada por un objetivo de crecimiento ambicioso, pero con problemas para conseguirlo. Se mantiene un proceso complicado de salida del confinamiento con volatilidades, y los conocidos problemas en el sector inmobiliario. En el tercer trimestre, la economía china creció un 4,6%, por encima de las expectativas y acercándose al objetivo del 5% gracias a la mejora de la actividad manufacturera, impulsada por el despliegue de políticas económicas expansivas. Las exportaciones intentan recuperarse con la Industria y las ventas minoristas estancadas, como consecuencia de lo que parece un cambio de mentalidad de los consumidores", opina Ignacio Muñoz-Alonso, estratega jefe macroeconómico de Inversis, en la presentación de la estrategia para el tramo final de 2024.
Crédito y Caución: la desaceleración china afectará a todo el mundo
Los datos del tercer trimestre han confirmado la desaceleración intertrimestral del crecimiento chino, que queda muy por debajo del objetivo oficial fijado en el 5% anual. Como segunda economía mundial, China representa alrededor del 10% del comercio internacional, el 16% del PIB global y el 17% de la demanda mundial de petróleo. Dado su tamaño, Crédito y Caución espera que las repercusiones de la evolución de su economía afecten a mercados en todo el mundo. Los sectores de materias primas, material eléctrico, maquinaria, química, metales básicos y TIC son los que podrían verse más afectados por una desaceleración china prolongada.
Los problemas económicos de China se ven agravados por la prolongada caída del mercado inmobiliario, que ha registrado el mayor descenso de precios de la última década. La confianza de los consumidores y las empresas sigue siendo baja, el desempleo juvenil preocupantemente alto y los cambios sociales profundos, con una tasa de natalidad en descenso y una población envejecida.
La respuesta de la Administración a la evolución de los indicadores económicos es el mejor indicativo de la gravedad de la situación. En septiembre, el banco central anunció una bajada de los tipos de interés, hipotecas más baratas y fondos extra para proyectos locales de inversión, un paquete de medidas que supondrá un alivio a corto plazo, pero no aborda los problemas estructurales de la economía china ni estimulará la demanda. Las economías y sectores con fuertes vínculos con China deben prepararse para el impacto de su aterrizaje.
Crédito y Caución espera un aumento del 23% de las insolvencias en la región Asia-Pacífico en 2024, debido principalmente a la ralentización del crecimiento chino. Economías como Taiwán, Singapur, Australia, Malasia, Vietnam y Corea del Sur son las más expuestas por el peso de sus exportaciones al gigante asiático. La revolución económica china arrastró a millones de ciudadanos a la clase media y creó una demanda de bienes sin precedentes que las empresas de estos mercados vecinos han satisfecho. Esa clase media sufre ahora una crisis de confianza que se está dejando sentir en la región Asia-Pacífico.
Los países de Europa, África y América Latina también podrían sufrir impactos significativos. La Unión Europea está especialmente expuesta a una interrupción de la cadena de suministro, ya que China es su principal proveedor de insumos críticos como microchips, piezas de turbinas o productos químicos. Además, China es el mayor socio comercial del África subsahariana, donde los países que exportan petróleo al mercado asiático están especialmente expuestos. Otros mercados como Rusia, Chile, Sudáfrica, Brasil y Australia, proveedores clave de materias primas a China, ya están notando el impacto de la crisis inmobiliaria y la caída del sector manufacturero.
De acuerdo con las estimaciones publicadas por la aseguradora de Crédito, el impacto de la evolución de China podría restar entre medio punto porcentual y un punto al crecimiento de estos mercados. Esta sacudida podría reducirse si se produjese una respuesta más contundente de la Administración china, con la aprobación de estímulos fiscales que contemplasen recortes de impuestos, subsidios o transferencias directas de efectivo para estimular la demanda.
Deutsche Bank: decepción con los estímulos fiscales
Un análisis del Deutsche Bank sobre China subraya que el estímulo fiscal de 10 billones de CNY anunciado en la reunión del Comité Permanente del Congreso Popular Nacional (NPC) decepcionó a los mercados, ya que se centra en aliviar la carga de la deuda de los gobiernos locales, pero no proporciona ningún apoyo directo para impulsar el consumo. Además, la demanda nacional sigue siendo moderada a pesar de las recientes medidas de estímulo monetario. Sin embargo, se espera que el sector inmobiliario se estabilice gradualmente en el segundo semestre de 2025.
El CNY seguirá bajo presión debido al fortalecimiento del dólar y a la inminente aplicación de aranceles por parte de Trump. En este contexto, el sentimiento de las Bolsas dependerá de una mejora de los datos económicos, ya que los efectos de las múltiples rondas de estímulos se propagarán gradualmente por las distintas partes de la economía.
"Se espera que las autoridades chinas anuncien nuevas medidas para apoyar las compras estatales de pisos no vendidos y recuperar terrenos residenciales no desarrollados de los promotores, así como inyecciones de capital para los grandes bancos estatales. Sin embargo, aún no se conocen detalles sobre el tamaño o el momento de estas medidas. Los mercados también estarán atentos a la Conferencia de Trabajo de diciembre para obtener indicaciones sobre medidas específicas para impulsar el consumo y el apoyo fiscal para compensar la posible disminución de la demanda externa debido a los aranceles bajo el régimen Trump 2,0.", señalan los expertos del banco alemán.