La XXVII edición del Informe Infoempleo Adecco: Oferta y Demanda de Empleo en España revela que 8 de cada 10 empresas admiten no formar a sus trabajadores en inteligencia artificial (IA), pese a que al 72,63% de los empleados les gustaríarecibirla. Alberto Gavilán, director de Talento del Grupo Adecco, señala que “formar a nuestros equipos en las nuevas tecnologías y hacerlo además desde un prisma ético, justo, inclusivo y sin sesgos es uno de los grandes deberes que debemos cumplir las empresas para ayudar a nuestros trabajadores a no quedarse atrás en esta nueva era de digitalización”.
“Las empresas que apuesten por la formación y la actualización de competencias estarán preparando a sus empleados no solo para adaptarse con éxito al nuevo contexto, sino para liderar el cambio y ser valiosos en los empleos futuros. La IA no reemplazará nunca el valor humano, sino que actuará como un 'copiloto tecnológico' que libere el potencial de los trabajadores”, añade.
“Las oportunidades de la IA deben ser impulsadas por un uso responsable de la tecnología, con foco en valores como la ética, el valor de las personas, la seguridad y la transparencia, así como en la seguridad de los datos. Por ejemplo, en el Grupo Adecco disponemos ya de un Comité de Ética con una orientación muy clara para respaldar todas las tecnologías que el Grupo utiliza o desarrolla, así como para implementar formación de reclutamiento sin sesgos en toda la organización para impulsar el uso responsable de la IA. Estos pasos son vitales para garantizar una implementación de la IA con todas las garantías para todas las personas”, insiste.
Por su parte, Teresa Tomás, CEO de Infoempleo, considera que “los avances tecnológicos que estamos viviendo, en especial la inclusión de la Inteligencia Artificial en la actividad de las empresas, están transformando el mercado laboral. La IA no solo está automatizando tareas repetitivas, sino que también está creando nuevas oportunidades de empleo en otros campos”.
Pero advierte también que esta transformación plantea retos importantes, como la necesidad de formación en competencias digitales y la adaptación de los trabajadores a nuevas formas de trabajo: “La integración de la IA en el entorno laboral requiere un enfoque equilibrado que combine la innovación tecnológica con la formación continua y la reubicación profesional. Por eso, es fundamental que tanto las empresas como la administración inviertan en programas de formación y
reciclaje profesional, para asegurar que la fuerza laboral esté preparada para las demandas del futuro”.
El 33,1% de las empresas españolas, con un nivel básico de intensidad digital
La UE se ha fijado dos metas principales de aquí a 2030: en primer lugar, que más del 90% de las pymes alcancen un nivel básico de intensidad digital, y como segundo objetivo que el 75% de las empresas utilicen servicios de computación en la nube, realicen análisis de big data o usen la IA. Según los datos recogidos en el último informe de Eurostat sobre la Digitalización en Europa, en 2023 casi el 60% de las empresas de la UE alcanzaron un nivel básico de intensidad digital. La proporción correspondiente a las pymes fue del 58%, alrededor de 30 puntos por debajo del objetivo de la UE para 2030, mientras que para las grandes empresas se situó en el 91%.
En España, el 33,1% de las empresas habría alcanzado ya un nivel de digitalización básico. Mientras que el 35,1% de las compañías tiene un nivel medio, el 24,9% tiene un nivel alto y el 6,9%muestra un nivel muy alto de digitalización.
Los servicios de computación en la nube son los procesos digitales que están más normalizados dentro de las empresas. En España un 30% de las compañías utiliza estos servicios para alojar el correo electrónico, almacenar archivos, software de oficina, procesador de textos, hojas de cálculo. entre otros. Un 9,2% de las empresas en España ya utiliza sistemas de IA en varios de sus procesos, por encima del 8% de media de las empresas dela UE.
Entre los países de la Unión Europea analizados, el uso de tecnologías de IA fue mayor en Dinamarca y Finlandia (ambos con un 15%), seguidos de Luxemburgo y Bélgica (ambos con un14%). España está situada en el undécimo puesto.
Un 50,59% de las compañías españolas reconoce que no están preparadas para la transformación digital que se está produciendo, ni tampoco para lo que queda por venir. De ellas, el 42,35% afirma que están en ello, y un 8,24% confiesa que están sobrepasadas por cambios que van demasiado rápidos.
Respecto a la posibilidad de implantar sistemas de IA en sus procesos de trabajo, un 44,71% de las compañías dice que no contemplan de momento esa posibilidad. Un 29,41% confirma que tienen pensado hacerlo en un corto plazo de tiempo, un 20% afirma que ya están introduciendo estos sistemas poco a poco, y tan solo un 5,88% asegura que tienen totalmente integrada la utilización de la IA en su actividad empresarial.
Entre las empresas que ya están usando sistemas de Inteligencia Artificial, la automatización de tareas administrativas es el uso más extendido (68,18%), así como la automatización de procesos productivos (59,09%) y el análisis de datos (59,09%). Además, un 45,45% cuenta ya con asistentes virtuales y de atención al cliente. El 18,18% tiene integrados estos sistemas para control de calidad, y un 9,09% utiliza la IA en los procesos de selección de personal.
El rápido desarrollo de la IA ha traído también consigo la necesidad de limitar ciertos usos de estas herramientas, que podrían vulnerar algunos derechos de los usuarios. Por el momento, un 77,65% de las empresas admite que no cuenta con ningún código ético de uso para sus herramientas de IA, mientras que un 22,35% sí que lo regula internamente. Ocho de cada diez empresas (84,71%) tampoco han facilitado a sus empleados ningún tipo deformación sobre Inteligencia Artificial, frente a un 15,29% que si se ha preocupado de ofrecerla.
En cuanto a la repercusión que ha tenido la IA en los niveles de empleo de las empresas, hasta el momento parece ser muy limitada. Hasta un 95,29% confirma que la IA no ha tenido ningún impacto significativo en la contratación de nuevos trabajadores ni tampoco en los despidos. Solo un 3,53% manifiesta que ha disminuido la contratación de trabajadores, y un 1,18% dice que ha aumentado la contratación como consecuencia de su utilización.
Un 72,25% de los trabajadores confirma que durante 2023 su empresa no les ha facilitado la posibilidad de utilizar sistemas de IA, frente a un 13,07% que sí lo ha hecho. Un dato interesante es que el 14,68% afirma que ya ha empezado a utilizar la IA por su cuenta, sin el apoyo de su compañía.
Entre los que ya utilizan la Inteligencia Artificial en su día a día laboral, un71,93% la emplea para la automatización de procesos productivos y un 56,14% para la automatización de tareas administrativas. El 38,60% usa la IA para el análisis de datos, el 21,05% cuenta con asistentes virtuales y de atención al cliente. Mientras que el 17,54% utiliza estas herramientas para control de calidad y un5,26% en la selección de personal.
También utilizan la Inteligencia Artificial para programar, para auditar, para el desarrollo de contenidos, publicaciones en redes sociales, campañas de marketing y otros procesos productivos.
La falta de formación es un hándicap importante para los trabajadores. Nueve de cada diez afirman que no han recibido una formación adecuada para el uso de la IA por parte de su empresa, pero al 72,63% le gustaría recibirla: un 39,55% dice que le gustaría recibir formación sobre automatización de tareas administrativas, y un 33,08% sobre automatización de procesos productivos.
La IA se usa para buscar empleo
La IA está desempeñando también un papel cada vez más importante en los procesos de selección, no solo por parte de las empresas para la evaluación de las habilidades, preselección de candidatos y desarrollos de carrera personalizados. Los profesionales también están integrando poco a poco el uso de estas herramientas en su búsqueda de empleo. Hasta un 18,88% de las personas en situación de desempleo ha utilizado algún sistema de IA para encontrar trabajo. El 70,35% afirma haber usado la IA para encontrar ofertas de empleo, un 48,84% lo ha utilizado para hacer su currículum y un 40,12% para identificar empresas a las que postularse. Además de otros usos aún menores como la elaboración de cartas y correos de presentación, test de personalidad, simulaciones de entrevistas.
Los trabajadores desempleados ven imparable la necesidad de conocimientos en IA en el futuro, pero todavía lo perciben como algo lejano. Así un 50,49% no cree que vaya a necesitar de forma inmediata estos conocimientos para conseguir su próximo empleo, pero sí que cada vez serán más necesarios. Mientras que un 34,25% están convencidos de que ya es fundamental esa formación en IA para encontrar empleo.