Miguel Ángel Valero
Juan José del Valle, responsable de análisis de la sociedad de valores Activotrade, destaca que, tras la primera vuelta de las elecciones en Francia, a pesar de la victoria del partido de Le Pen con más del 34% de los votos, el euro se dispara acercándose al nivel de referencia del último semestre en zonas no lejanas a 1,08 mientras que los futuros del CAC 40 vienen con subidas cercanas al 3%. "No sería descartable ver a los bancos franceses empezar la jornada con subidas cercanas al 5-6%. Recordemos que a modo de ejemplo las acciones de Societe Generale se dejaron cerca de un 20% el último mes", apunta.
"Parece que el hecho de que no se haya conseguido mayoría absoluta de la ultraderecha dejando todo abierto para la segunda vuelta del próximo domingo 7 de julio está sentando bien a los mercados, cayendo la prima de riesgo francesa 7 puntos básicos haciendo mínimos de las últimas dos semanas. Los futuros europeos abren con fuertes subidas tras la primera vuelta en las elecciones de Francia, donde la Agrupación Nacional de Le Pen con el 34,2% de los votos gana las legislativas por primera vez (a pesar de que no tenga la mayoría absoluta). El CAC40 comienza el segundo semestre del año abriendo con una subida del 2,5%, donde los inversores continúan pendiente del resultado final como de las resultantes políticas de gasto de las finanzas francesas", añade el experto de Activotrade.
Por su parte, Alex Everett, Investment Manager de abrdn, cree que los resultados de la primera vuelta coinciden en líneas generales con las expectativas, por lo que "es probable que los mercados respiren temporalmente aliviados". "El riesgo de una mayoría de izquierdas parece haberse evitado, lo que disipa los peores temores de los mercados ante la posibilidad de que el gasto se desboque. Sin embargo, aún no estamos fuera de peligro. La Agrupación Nacional (RN) ha superado las expectativas, y puede obtener en la segunda vuelta los votos necesarios para una mayoría relativa o incluso absoluta. Es probable que hasta la noche del martes los partidos de centro e izquierda lleguen a acuerdos para tratar de impedirlo", explica.
"La única certeza es la incertidumbre. Los bonos OAT pueden ajustarse un poco frente a los bunds, pero sólo hasta cierto punto, ya que el futuro de Francia sigue sin estar claro y el riesgo político es elevado. La reducción del riesgo de contagio debería respaldar a la deuda soberana europea no francesa", considera.
Samy Chaar, Economista jefe y CIO de Suiza, y Bill Papadakis, Estratega macro senior de Lombard Odier, destacan que en las elecciones de primera vuelta de ayer, el electorado francés otorgó al partido populista ‘Rassemblement National’ un 33.2% de los votos, cumpliendo con las expectativas. El ‘Nouveau Front Populaire’ (NFP), una alianza de partidos de izquierda, consiguió el segundo mayor porcentaje de votos con un 28%, mientras que los centristas de ‘Ensemble’, representados por el primer ministro Gabriel Attal e incluyendo al partido ‘Renaissance’ del presidente Emmanuel Macron, obtuvieron el tercer lugar con un 21%. Esto otorga al partido RN una mayoría relativa, sin alcanzar una mayoría absoluta, que requeriría al menos 289 de los 577 escaños de la cámara nacional.
"Sin embargo, los resultados de la primera vuelta ocultan una gran incertidumbre sobre la composición final del parlamento francés. Esto genera un número inusualmente alto de contiendas a tres bandas por los escaños parlamentarios, dificultando enormemente las previsiones: tradicionalmente, el líder de la primera vuelta gana una gran parte de las circunscripciones en la segunda vuelta, pero esto resulta menos claro en esta ocasión. El resultado final dependerá de cómo los partidos de centro e izquierda decidan presentar sus candidatos en la segunda vuelta de votación el 7 de julio", avisan.
Históricamente, los partidos políticos franceses se han coordinado para bloquear el acceso al poder de la extrema derecha. El factor crucial es la estrategia de segunda vuelta del centro y la izquierda, y el resultado de las negociaciones entre ellos. Jean-Luc Mélenchon, líder del partido izquierdista ‘France Insoumise’ (LFI), ha declarado que los candidatos de su partido que quedaron en tercer lugar se retirarán. El centro también ha adoptado un enfoque similar, según declaró Attal, aunque haciendo una excepción en las segundas vueltas contra los candidatos de extrema izquierda de LFI. La fecha límite para dichos acuerdos es el 2 de julio.
"El resultado más probable parece ser un parlamento ‘colgado’ que corre el riesgo de una parálisis política, ya sea con un gobierno interino o con un gobierno minoritario liderado por el RN, al menos hasta las próximas elecciones presidenciales programadas para abril de 2027", añaden los expertos de Lombard Odier.
Francia ha experimentado ‘cohabitaciones’ similares en los años 80 y finales de los 90 y principios de los 2000, pero esto "dejaría la legislación doméstica estancada y reduciría la probabilidad de que se aborde el déficit fiscal del país".
"La pregunta clave en una posible victoria del RN sería cómo elegirían gobernar. ¿Adoptarían un enfoque confrontacional y romperían con la Unión Europea en temas como el presupuesto? ¿O adoptarían un enfoque más conciliador, similar al del gobierno de extrema derecha italiano de Giorgia Meloni, acercándose al centro político en muchos temas?", apuntan.
Los mercados financieros han anticipado la posibilidad de un entorno político francés paralizado desde que el presidente Macron disolvió la Asamblea hace tres semanas. La diferencia entre los OATs franceses a 10 años o ‘Obligations assimilables du Trésor’ y los Bunds soberanos alemanes se amplió tras la decisión de disolver el Parlamento, mientras que el índice CAC40 francés cayó un 6.5% durante el mes de junio, y el euro registró su mayor caída en un año frente al dólar. Tras los resultados de la primera vuelta, estos movimientos del mercado se han revertido parcialmente.