Miguel Ángel Valero
Impulsada por el programa económico del primer ministro, el nacionalista Narenda Modi, India se ha embarcado en una fase de inversión en infraestructuras similar a la de China en los años 90 del siglo XX.
"El surgimiento de una era de desglobalización, alejándose de la fabricación centralizada en China, añade un nuevo impulso al enfoque de política interna de la India. Este cambio podría reflejar el auge de la inversión extranjera de China en la década de 1990 a medida que las industrias se trasladaban desde Occidente", sugiere este experto.
En las últimas décadas, las empresas indias han logrado un crecimiento de los beneficios y un rendimiento de los fondos propios al estilo estadounidense, lo que ha creado un catalizador a medio plazo para aumentar el crecimiento de los beneficios por acción y el rendimiento de los fondos propios. "En comparación con el universo más amplio de los mercados emergentes, las acciones indias están cotizando cerca de sus valoraciones históricas promedio, debido al crecimiento de superior de los beneficios de cara al futuro", señala el experto de UBP. "El MSCI India está negociando a valoraciones premium, atribuidas principalmente a la revalorización de los servicios de tecnología de la información después de la pandemia", subraya.