La nueva Solvencia II liberará 90.000 millones para inversiones de aseguradoras

Miguel Ángel Valero

La Unión Europea (UE) adoptó formalmente las nuevas normas que relajan los requisitos de capital de las compañías aseguradoras con el fin de liberar fondos que puedan dirigirse a inversiones a largo plazo, sobre todo para objetivos climáticos y medioambientales. Los ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin) aprobaron esta legislación, que será publicada ahora en el Diario Oficial de la UE y tendrá que ser aplicada por los Estados miembros dos años después, según informó en un comunicado el Consejo de la UE, que representa a los gobiernos. Éstos y el Parlamento Europeo alcanzaron en diciembre de 2023 un acuerdo para actualizar las normas europeas de solvencia del sector asegurador e introducir, por primera vez, un marco común para que las autoridades puedan intervenir cuando las grandes aseguradoras estén en riesgo de quiebra y ejecutar su resolución, como ya ocurre con los bancos.

La propuesta aprobada, presentada por la Comisión Europea en 2021, renueva Solvencia II para reducir los niveles de reservas que deben tener las aseguradoras, que ahora se sitúa en un 6%, medido con la ratio de coste del capital, y pasará a ser del 4,75%.La Comisión Europea calculó que estas medidas permitirían liberar 90.000 millones€ en los próximos diez años, dando así más margen para invertir a una industria que gestiona 10 billones en activos.

El acuerdo introduce además cambios en la supervisión de las aseguradoras con el fin de que los requisitos sean más proporcionados, sobre todo para aquellas de menor tamaño y con modelos de negocio más seguros.

Por otro lado, los Gobiernos dieron luz verde a la nueva Directiva de reestructuración y resolución de las grandes aseguradoras, que armonizará, por primera vez, las normas a escala europea y dará a las autoridades nacionales poderes para intervenir en una fase temprana cuando detecten problemas.

 La Directiva exigirá que las compañías y grupos aseguradores que representen más del 60% de su respectivo mercado tengan que elaborar y remitir a las autoridades nacionales planes de recuperación preventivos. En el caso de las que representen al menos el 40% de su respectivo mercado, serán las autoridades nacionales las encargadas de diseñar un plan de resolución, mientras que los grupos más pequeños y menos complejos no tendrán que hacer planes individuales. Cada país deberá crear un autoridad de resolución, con poderes para intervenir en caso de que una aseguradora se declare insolvente e incluso ejecutar su resolución si es necesario. Para ello podrán realizar quitas, conversiones de deuda o transferencia de negocio, aunque algunos instrumentos de deuda estarán excluidos de sufrir quitas. 

Mapfre Economics analiza las inversiones del sector asegurador

No podían elegir mejor momento Mapfre Economics y Fundación Mapfre para publicar una actualización del informe Ahorro e Inversiones del Sector Asegurador. El estudio destaca el déficit estructural de ahorro, que se mantiene desde 2020, y que se espera un aumento de los déficits en varias regiones, a la vez que se mantiene la esperanza de que los países con poblaciones jóvenes puedan convertirse en futuros proveedores de ahorro.  

La reponderación de las carteras de las aseguradoras entre diferentes tipos de activos suele ser marginal por la necesidad del casamiento de plazos, tipos de interés y monedas con su pasivo, así como por los consumos de capital. No obstante, en renta fija se producen reponderaciones, especialmente en duración (mitigación de riesgo de tipos), en anticipación a los movimientos de tipos de mercado y de los bancos centrales (por la inflación), y también, en alguna medida, reponderaciones por rating (mitigación del riesgo de crédito del emisor). 

En la Eurozona la renta fija sigue siendo mayoritaria pero pierde 8,2 puntos de peso. Sube 5,5 puntos la renta variable. En EEUU, la renta fija cae 4,6 untos, en beneficio de los depósitos y la liquidez (+1.6 puntos) y de la renta variable (+1,2)

Las aseguradoras se encuentran más expuestas a los mercados internacionales y al riesgo de las oscilaciones de los tipos de cambio (como ocurrió en el evento de volatilidad por el “carry trade” en agosto). 

Entre los mercados desarrollados considerados en este análisis, el español es el que presenta la mayor proporción de su cartera de inversiones en renta fija y, al mismo tiempo, una mayor concentración en la renta fija soberana. Sin embargo, si se consideran los mercados brasileño y mexicano, éstos presentan porcentajes de inversiones en valores de renta fija incluso superiores a los del mercado español. En este sentido, se observa que en los mercados aseguradores con un menor nivel de desarrollo relativo (medido por el volumen de activos de sus carteras de inversión), el porcentaje de inversiones en valores de renta fija tiende a ser mayor. 

El mercado asegurador español continúa siendo uno de los que presentan una menor participación de la cartera de inversiones asociada a productos del tipo “unit-linked” en la Eurozona (el menor de la muestra analizada), con el 12,8%. Sin embargo, desde el año 2016 (con un peso mínimo del 5,5%) y hasta 2023, experimentaron un crecimiento significativo de 7,3 pp. A pesar de ello, el porcentaje de este tipo de inversiones continúa significativamente por debajo de la media de la Eurozona, en la que, en 2023, representaban el 20,8% de las inversiones totales.

Mientras que en 2016 las inversiones en renta fija representaron el 75,7% del total, para 2023 ese porcentaje se había reducido al 72,8% (-2,9 pp), al tiempo que se redujo la partida de depósitos y tesorería (-3,5 pp). 

También hay un predominio de la renta fija soberana, que acapara el 51,6% del total de la cartera de inversiones, en tanto que la renta fija corporativa significó el 19,2%. En el mercado de seguros de España sobresale el alto porcentaje de inversiones en bonos soberanos, así como el menor porcentaje de inversiones en renta variable, comparado con la media de la Eurozona.

Las insurtech recibirán 4.200 millones$ 

Por otra parte, la financiación de capital de riesgo en startups de tecnología aplicada a los seguros (insurtech) alcanzará los 4.200 millones$ a final de 2024, cifras similares a las de 2018 y 2023. Durante los tres primeros trimestres del año, la financiación ha llegado a los 3.200 millones, un 7% menos que en 2023. No obstante, la tendencia es positiva y sugiere un repunte para la recta final del año. Las startups en fase avanzada (aquellas en busca de rondas de financiación de más de 100 millones) están siendo las que mayor caída están sufriendo, con un descenso de casi el 90% respecto a su pico de 2021. Sin embargo, son éstas las que liderarán la recta final de año, ya que muchas han estado trabajando en reforzarse para estar preparadas para su salida en los próximos años, según la 4ª edición del informe ‘The State of Global Insurtech’, elaborado por Dealroom.co, Mundi Ventures y Mapfre. S

Si bien la falta de financiación en startups late-stage es la principal causa del estado actual del ecosistema, las pequeñas empresas en fase pre-semilla, semilla o series A también están tardando en estabilizarse, con una caída del 50% respecto a su momento cumbre en 2021.En lo que respecta a aquellas en Series B o C, su financiación ha sido la más alta de todas y las perspectivas indican que a cierre de 2024 llegará a los 2.400 millones. Estos datos colocan su situación actual en niveles pre-pandemia.

Las neoaseguradoras están evolucionando la dinámica del mercado tecnológico y los cambios en el sector asegurador, lo cual les ha permitido reconocer los principales retos del sector y demostrar su valor. Esto se refleja en el rendimiento de sus acciones, que han experimentado un notable crecimiento en los últimos años.

EEUU continúa liderando la inversión (1.800 millones$), seguido de Europa (1.100 millones), ambos con tendencia al alza. Mercados emergentes como América Latina están sufriendo más por llamar la atención de los inversores, continuando en mínimos históricos con 37,1 millones$ de financiación. No obstante, la brecha de penetración de los seguros está, poco a poco, reduciéndose en el continente, por lo que las perspectivas de crecimiento aún se mantienen optimistas. Además, hay rondas de financiación que no son públicas, y los inversores están observándola de cerca, con miras hacia un futuro cercano más positivo.

Las compañías del ecosistema insurtech enfocadas en el Software as a Service (SaaS) y con un modelo de negocio B2B (Business to Business) han conseguido el 43% de la financiación total, la tasa más alta de la historia. En este grupo de startups se incluyen los proveedores de software, tarificación, gestión de riesgos, underwriting, tecnología para la administración y  para reaseguros, entre otros. Además, muchas de ellas basan su oferta en productos de inteligencia artificial (IA) o están expandiendo sus carteras con nuevos centrados en IA.

El segmento de Vida y Salud (L&H en inglés) ha atraído el 50% de la financiación este año, situándose al mismo nivel que el segmento de seguro de bienes y accidentes (P&C en inglés) por primera vez en tres años. En el primero, el motor principal ha sido el área de salud; en el segundo, los riesgos climáticos y los seguros empresariales.

En lo que respecta a las grandes tendencias del sector, la IA generativa, los riesgos climáticos y el ámbito de la salud son tres de los ámbitos donde la industria se está enfocando más en este año. La IA generativa está empezando a optimizar los procesos aseguradores, pero aún sigue siendo necesaria una labor por parte de las grandes compañías, especialmente, a la hora de contribuir a la concienciación y educación de la sociedad, aportando medidas preventivas para reducir los riesgos de particulares y empresas. El área de los riesgos climáticos, por su parte, ha recibido una financiación considerable y estable desde 2021. Sobre el sector sanitario, y dado que las enfermedades crónicas representan entre el 70% y el 90% de los gastos sanitarios en mercados desarrollados, la atención preventiva, la intervención precoz y una mejor gestión están cobrando cada vez más importancia.

Javier Santiso, CEO y socio general en Mundi Ventures, declara: "Después de la incertidumbre de los años anteriores, el mercado insurtech global muestra signos de una mayor estabilización. Aunque el frenesí ha disminuido, estamos viendo un repunte positivo en las etapas de crecimiento temprano y de despegue, particularmente con un aumento en la financiación de la Serie B.Sin embargo, el mercado late-stage sigue estando significativamente restringido, con un congelamiento en las fases de crecimiento y de ofertas públicas iniciales (IPO). Muchas startups ahora se están preparando para posibles IPO en 2025 o 2026, estableciendo modelos rentables y esperando condiciones de mercado más favorables. Este entorno cauteloso está cambiando el enfoque de los inversores hacia modelos de negocio probados con una sólida economía unitaria".

Leire Jiménez, Chief Innovation Officer en Mapfre, señala: "A nivel mundial estamos viendo una desaceleración de la economía desde 2022, lo que está impactando directamente en la inversión en capital de riesgo para el ecosistema insurtech, en algunas geografías más que otras. Estados Unidos y Europa, por ejemplo, están de nuevo en crecimiento y mostrando un desempeño optimista.Sin embargo, Asia y América Latina están teniendo dificultades para recaudar fondos, presentando esta última los niveles de financiación más bajos de su historia. A pesar de esto, el ecosistema latinoamericano es resiliente, y los emprendedores continúan buscando nuevas fórmulas, modelos y negocios para revitalizar el sector. La región tiene un gran potencial, sobre todo en un momento en que la brecha aseguradora se está reduciendo de manera gradual debido a su gran volumen de oportunidades. Los espacios colaborativos y las asociaciones público-privadas son clave para estabilizar el mercado y promover su avance".

Yoram Wijngaarde, CEO y fundador de Dealroom.co, destaca: "La industria aseguradora ha permanecido prácticamente inalterada durante cientos de años. En este contexto, uno de sus grandes objetivos es la eficiencia y la escalabilidad tecnológica, áreas en las que aún se está trabajando. El paradigma de la insurtech 2.0 está haciendo más digerible el reto, centrándose en nichos como B2B SaaS, gestión de riesgos, clima y ciberriesgos, con mayor tracción. La inversión mundial en startups en fases iniciales (pre-semilla, semilla y Series A) está en camino de crecer año tras año en 2024, y el capital riesgo europeo en insurtech ya ha superado el total de 2023. La tecnología de seguros está iterando".