La UE refuerza la protección de la Ribeira Sacra

El Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE) del 11 de septiembre contiene la publicación de una comunicación de aprobación de una modificación normal del pliego de condiciones de una denominación del sector vitivinícola, que afecta a la Denominación de Origen Protegida (DOP) Ribeira Sacra.

Las modificaciones consisten en: 

  • el límite mínimo de acidez total disminuye de 4,5 a 4 g/l ácido tartárico, para todos los tipos de vinos.
  • el límite máximo de acidez volátil aumenta: 
    • para los tintos jóvenes pasa se 0,70 a 0,80 g/l ácido acético; 
    • y en los tintos con envejecimiento (Barrica y Garda) pasa de 1,00 a 1,20 g/l ácido acético; 
    • y los blancos con envejecimiento (Barrica y Garda) pasan de 1,00 a 1,08 g/l ácido acético.
  • el límite máximo de sulfuroso (mg/l) aumenta: 
    • en tintos jóvenes de 120 a 150, 
    • en tintos envejecidos (Barrica y Garda) de 140 a 150; 
    • en los rosados de 120 a 200;
    • y en todos los blancos (jóvenes y envejecidos -Barrica y Garda-) de 160 a 200.

Se justifican los cambios en la necesidad de adaptar los valores de los parámetros analíticos de los vinos a la situación actual, ya que después de casi treinta años de existencia de la Denominación de Origen, estos valores han permanecido prácticamente inalterados. En este sentido, debe tenerse en cuenta que hay una clara tendencia, vinculada al cambio climático, a la obtención de vinos con graduaciones alcohólicas más elevadas, lo que ha influido en la modificación de otros parámetros analíticos, en particular, la acidez total y la acidez volátil.

Además, se deben tener en cuenta también los cambios que se han producido en la elaboración de los vinos. Se están haciendo vinos que, aun siendo jóvenes, pasan cada vez más tiempo en depósito, incluso de una añada para otra, frente a lo que se hacía antes, que habitualmente eran vinos que pasaban poco tiempo en depósito. Esto influye en el aumento de la acidez volátil y en la bajada de la acidez total, así como en el aumento de los valores en dióxido de azufre para evitar una excesiva acidez volátil.