La 'vacuna' a las supuestas consecuencias inflacionistas de los planes de Trump es levantar el pie del acelerador y pisar el freno en cuanto a las bajadas de tipos.
El nuevo presidente de EEUU ha creado "un escenario con muchas ‘piezas móviles’ que tendrán implicaciones directas en el crecimiento, la inflación y las políticas monetarias y fiscales a nivel global”.